La velocidad no termina, y mientras Sara Varón corre en las curvas más difíciles, sus papás la apoyan desde Colombia, ya que ellos fueron los responsables de que ella se volviera amante de las ruedas y la adrenalina, debido a que en su juventud practicaron el mismo deporte.
“Mis papás corrían desde antes que yo naciera, así que cuando era bebé, ellos me llevaban a las carreras. Siempre he estado rodeada de este lindo deporte, pues además mi papá tenía un taller de motos”, relató Sara para RÉCORD.
A diferencia de la gente común, Sara Varón aprendió a dominar las bestias de dos ruedas desde los cinco años, razón por la que ahora no tiene rival que la pueda vencer.
“Yo aprendí a manejar moto a los cinco años y a los seis ya estaba compitiendo. Mi primera competencia fue callejera allá en Colombia y fue hasta los 15 años que dejé de correr en carreras callejeras”, añadió.
Sus primeros ídolos del motociclismo fueron sus papás, pero mientras se fue metiendo más a este deporte, se enamoró de la destreza de Valentino Rossi, Marc Márquez y Jorge Lorenzo.
“Mis papás se sienten contentos, porque les gusta este deporte, conocen la pasión y la adrenalina y me han apoyado siempre”, concluyó Sara Varón.