El de Renata Zarazúa y el Abierto de Monterrey es un amor imposible, una de esas relaciones que no proliferan porque sus tiempos nunca coincidieron. El año pasado la mexicana estaba en su punto tras llegar a semifinales del Abierto de Acapulco, pero el torneo regio no le dio una invitación para intentar mantener su sorprendente racha en el estadio GNP Seguros, y en cambio, la mexicana cayó eliminada en primera ronda en una edición en la que llegaba como la imagen y estandarte del torneo.
La ganadora del Premio Nacional de Deporte fue eliminada en la primera ronda del Abierto de Monterrey a manos de la eslovena Tamara Zidansek, quien cobró revancha después de que hace un año la azteca la venció en el Abierto de Acapulco. La número 93 del mundo se impuso por parciales de 7-6(8) y 6-3 para inclinar la balanza 2-1 a su favor ante la mexicana de por vida.
El duelo de una hora con 50 minutos fue entonces para la europea de 23 años, quien aprovechó que Zarazúa fue víctima de sus propios errores al ceder en tres ocasiones su servicio en la primera manga e incluso tuvo un set point que dejó ir. Ya en el tie break la mexicana salvó un triple punto para set pero no sirvió de mucho, pues en un error forzado marcó su debacle.
Ya en el segundo set, Zidansek tomó el control del partido ante el desmoronamiento psicológico de Zarazúa. Ahora, la eslovena se topará en la segunda ronda del torneo regio frente a la estadounidense Ann Li, quien derrotó son problemas a la neerlandesa Arantxa Rus.
