Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez, clavadistas mexicanas, superaron las adversidades dentro y fuera de las plataformas para colgarse la medalla de bronce en la Final de 10 metros Femenil de Tokio 2020.
Rumbo a la justa veraniega, la dupla tricolor enfrentó el fallecimiento del entrenador de Agúndez, Yuniesky Hernández, la incertidumbre por el aplazamiento de la máxima justa deportiva, el incendio del gimnasio de clavados en el Code Jalisco, y vencieron el Covid-19. Obstáculos que las llenó de madurez y fortaleza para conquistar el boleto olímpico.
"El camino no ha sido fácil, he aprendido a valorar, he aprendido a que el trabajo duro tiene su recompensa, tiene su resultado. Me siento muy satisfecha de lo que he trabajado todo este tiempo, de cómo se dio también los resultados para llegar a Juegos Olímpicos.
"Mi camino personal y mi camino en conjunto con Gaby, las dos hemos hecho muy buen trabajo todo este ciclo, todos estos años y ahora que culmina en el objetivo final me llena de mucha satisfacción”, declaró Orozco previo a la competencia en entrevista a RÉCORD.
CON BROCHE DE BRONCE
A pesar de la adversidad, el trabajo las recompensa. Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez ganaron la medalla de bronce en los Clavados Sincronizados desde la Plataforma de 10 Metros.
Con 299.70 puntos las mexicanas se quedaron con el tercer puesto en una competencia en la que las chinas Chen y Zhang se llevaron el primer lugar y la medalla de Oro; mientras que las estadounidenses Parratto y Schenll se quedaron con la Plata.
UN SÍ SE PUDO HASTA EL CIELO
Tras colgarse la medalla de Bronce en Tokio 2020, las clavadistas son conscientes de el logro que se consiguió con paso firme y trabajo en equipo.
"Sólo pensé en lo logramos, sí se pudo, lo hicimos. Pensé en la lista completa de todos los que estuvieron y de los que ya no están, fue un sí se pudo, lo soñamos y lo trabajamos.
"Se dio el resultado, un trabajo en conjunto, con el profe Yuniesky que seguro está brincando en el cielo", declaró Ale Orozco ante los medios.