Esta última semana comenzó un tanto polémica dentro de la NFL cuando varios corredores alzaron la voz y dijeron sentirse menospreciados. La posición siempre ha sido pilar para las ofensivas y no se podría concebir el futbol americano sin un backfield. Sin embargo, lo cierto es que con el paso de los años, los equipos se han basado más en el juego aéreo y han dejado el ataque terrestre para opciones de poco yardaje.
El pasado lunes fue el día límite para que algunos jugadores lograran arreglarse con sus respectivos equipos y recibir una extensión de contrato. Pero esto no sucedió y muchos jugarán la temporada 2023 bajo la etiqueta de jugador franquicia.
Entre esta lista nada presumible se encuentran tipos de la talla de Austin Ekeler, Tony Pollard, Saquon Barkley y Josh Jacobs, este último el líder en yardas por tierra en la más reciente temporada 2022.
El salario base que percibe un corredor franquicia es el segundo más bajo de la Liga, con 10.1 millones de dólares anuales. La diferencia es abismal si se toma en cuenta que un quarterback con estas mismas características recibe un promedio de 32.4 millones. Le siguen los linebackers con 20.9 millones, dejando atrás lo que pretenden los running backs.
"Este es el tipo de basura que ha devaluado una de las posiciones más importantes. Todos saben que es difícil ganar sin un corredor y actúan como si fuéramos artilugios descartables", indicó Ekeler, en un tono muy molesto, en redes sociales.
Echando un vistazo a las estadísticas desde la fusión de la NFL y la AFL en 1970, el juego aéreo siempre ha tenido mejores números, pero entre los 70 y 80 la distancia no era tanta.
Para los 90 y sobre todo en el nuevo siglo, las estadísticas entre el pase y el juego terrestre se dispararon.
En la temporada de 1970, por ejemplo, se totalizaron 58 mil 745 yardas por pase, mientras que por tierra se firmaron 43 mil 820, una diferencia de 14 mil 925.
Al finalizar el 2022, se generaron 118 mil 438 yardas por pase y 65 mil 894 por tierra. Importante destacar que hace 53 años había menos equipos y menos juegos a lo largo del año en el emparrillado.
Aunque luce difícil que el corredor desaparezca de la NFL, sí es un hecho que la posición va siendo menos indispensable para el accionar de las ofensivas, mientras que los pases por aire y los brazos de los mariscales de campo van tomando más fuerza cada año en la Liga.
LEJOS DEL TOP DE LOS SALARIOS
McCaffrey, ahora jugador de los Niners, en un encuentro de la temporada pasada.
Otro de los aspectos que ejemplifican el menosprecio del que hablan los corredores es el tema del mejor pagado anualmente, el cual dista mucho de los jugadores que más dinero se lleban al bolsillo.
Christian McCaffrey, de 49ers, es el corredor con el salario anual más alto; Overthecap y Spotrac colocan al jugador con 16 millones de dólares, muy por debajo de Lamar Jackson, quarterback de Ravens, con un promedio anual de 52 mdd.
Por encima de McCaffrey hay 100 jugadores en el listado que muestra Overthecap, entre ellos quarterbacks, linebackers, receptores, elementos del perímetro y hasta linieros.
Apenas son cinco los corredores que tienen un promedio de salario anual por encima de los 10 millones y son, además de McCaffrey, Alvin Kamara, Derrick Henry, Nick Chubb y Aaron Jones.
Kamara se encuentra en la primera posición dentro de los contratos con 75 millones de dólares de salario.
