Lamar Jackson demostró que es un serio candidato a convertirse en el MVP de la temporada, al comandar una escandalosa paliza de los Baltimore Ravens sobre Los Angeles Rams.
El quarterback de 22 años lanzó para 169 yardas y cinco de los seis touchdowns que Baltimore consiguió en sus seis primeras posesiones. Con ello, se convirtió en el primer jugador en la historia de la NFL con cuatro o más pases de anotación y 50 yardas terrestres en partidos consecutivos para comandar el triunfo de 45-6 en el Memorial Coliseum.
Apenas en su primera serie, los Ravens se fueron al frente en el marcador gracias a un drive de nueve jugadas que culminó con un excepcional pase de seis yardas de Jackson para Marquise Brown dentro de las diagonales. Los Rams no aprendieron la lección y el binomio Lamar-Marquise repitió dosis, ahora con un pase de 18 yardas para poner 14-0 el marcador.
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Una descomunal escapada de 29 yardas de Jackson dejó a Mark Ingram en posición de acarrear el ovoide una yarda para anotar su primer touchdown de la noche. Y todavía antes del descanso, Lamar volvió a arrastrar las cadenas hasta completar un pase de siete yardas para Willie Snead, y de esa forma anotar el cuarto tochdown de los Cuervos.
Fue una actuación perfecta de Jackson en la primera mitad, en la que completó nueve pases de nueve intentos y se convirtió en el primer quarterback en la historia de la NFL en acumular más de tres mil yardas por aire y mil 500 por tierra en sus primeras dos temporadas.
El tercer cuarto no fue diferente y Baltimore anotó con otro pase del egresado de Louisville en la zona roja, esta vez con Ingram.
Todavía Jackson tuvo tiempo para lanzar su quinto pase de anotación antes de ser sustituido por Robert Griffin III en el último cuarto, ya con el noveno triunfo de la temporada para los Ravens en el bolsillo.
