Raiders contrató a Jimmy Garoppolo durante la agencia libre para ser su nuevo mariscal de campo luego de que dejaran ir a Derek Carr a los Saints de Nueva Orleans. Sin embargo, el equipo sabe que se arriesgan a que el jugador no juegue todos los partidos.
El QB ha tenido una carrera plagada de lesiones. Desde sus inicios con los Patriotas de Nueva Inglaterra hasta su extenso paso con los 49ers de San Francisco el originario de Illinois no ha podido mantenerse sano. La temporada pasada tuvo una fractura en su pie lo cual lo dejó fuera casi toda la temporada.
Ante la situación, el equipo y el jugador llegaron a un acuerdo para incluir el ‘Anexo 2 Clausula G’, donde los Raiders se protegen en caso de que Jimmy G sufra una lesión durante la temporada regular.
La cláusula subraya que Garoppolo renuncia a cualquier reclamo a Raiders, la liga y otras partes relevantes relacionadas con la condición de su pie. Esta disposición protege al equipo de posibles consecuencias legales derivadas de dicha lesión.