El emparrillado se está poniendo a punto para una nueva temporada de la NFL; esta noche, en el Draft 2019 las estrellas del futbol colegial encontrarán cabida en cada una de las 32 franquicias.
El que se presume para ser la primera selección global es Kyler Murray, pasador heredero de Baker Mayfield en Oklahoma. Tuvo un año fantástico, fue condecorado con el Trofeo Heisman y aunque perdió el campeonato nacional ante Alabama, sus números fueron únicos, con récord de 12 victorias por sólo dos derrotas y 42 pases de anotación.
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Murray, el año pasado rechazó fichar en MLB, con los Athletics para perseguir su sueño en el deporte de las tacleadas y la primera franquicia que ha preguntado por él es Arizona quien tiene a Kliff Kingsbury, coach que lo conoce a la perfección.
Quien se pelea entre rumores la primera selección es Nick Bosa, ala defensiva de Ohio State cuyo 2017 fue su año su de brillantez que le valió ser considerado como el jugador estelar de esta clase a pesar de que la temporada pasada estuvo lesionado. En aquel año tuvo 43 tacleadas, 16 de ellas para pérdidas de yardas y 8.5 capturas. Este jugador proviene de una familia de tradición futbolera; su hermano Joey es parte de Chargers y es hijo de John Bosa, exjugador de los Dolphins en 1987.
El tackle defensivo Quinnen Williams es el tercero en discordia en la conversación para el pick número 1 del Draft. Ganador del trofeo Outland, físicamente es muy fuerte y en el scouteo de este año registró la velocidad más alta para un liniero defensivo desde 2012. El último jugador que registró un tiempo similar en la misma posición fue J.J. Watt, de Texans. Equipos como Oakland, Jets y Cardinals lo están pretendiendo.
El destino y el futuro de las 32 franquicias se empieza a dibujar desde hoy, fecha del nacimiento de las próximas leyendas.