Drew Brees, quarterback de los New Orleans Saints fue blanco de críticas tras asegurar que estaba en contra de las protestas de los jugadores de la NFL al momento de la entonación del himno nacional como arrodillarse.
Ante esta situación Brees reconoció que fue una postura equivocada y se retractó de lo dicho, algo que no fue bien visto por Donald Trump, quien reclamó al pasador de los Santos por su nueva postura.
El reclamo de Trump tuvo eco en el mariscal de campo, quien pidió no distraer el problema racial en el país con temas de símbolos patrios.
"A través de mis conversaciones con mis amigos, compañeros de equipo y líderes en la comunidad de gente de color, me he dado cuenta que no es un asunto sobre la bandera de los Estados Unidos. Nunca lo ha sido. No podemos usar más a la bandera para alejar a la gente o distraerlos de los asuntos reales que enfrentan nuestras comunidades de color", redactó Brees en redes sociales.
"Lo hicimos en 2017, y lamentablemente lo volví a comparar con mis comentarios de esta semana. Debemos parar de hablar sobre la bandera y cambiar nuestra atención a los problemas reales de sistemática injusticia racial, opresión económica, brutalidad policíaca y una reforma judicial y de prisión. Estamos en una coyuntura crítica en la historia de nuestra nación. ¿Si no es ahora, cuándo?", añadió.
Así fue la postura de Brees, después de que Donald Trump tuiteara: "…no debió haberse retractado de su postura inicial sobre honrar nuestra magnífica bandera”.
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