Sam LaPorta tuvo una recepción de 2 yardas para touchdown durante el primer cuarto, pero más adelante salió cojeando del terreno a causa de una lesión en la rodilla, un hecho siniestro para los campeones de la División Norte de la NFC Detroit Lions cuando cerraban la ronda regular el domingo con una victoria de 30-27 ante los Vikings de Minnesota.
Detroit (12-5) igualó un récord de franquicia en victorias y recibirán un juego de postemporada por primera vez desde la temporada de 1993 cuando jugaron en el Pontiac Silverdome.
Los Lions estarán la semana venidera esperando que LaPorta, quien estableció un récord de NFL con 86 recepciones para un ala cerrrada novato, esté lo suficientemente saludable para ayudarlos a obtener una segunda victoria de postemporada desde que ganaron el título de la liga en 1957.
El entrenador en jefe de los Lions de Detroit Dan Campbell prefirió jugar con todos sus titulares pese a que lo más que pudiesen aspirar los Lions era mejorar su posición de cara a los playoffs pasando del tercer al segundo sembrado en la NFC. Necesitarán que los Cowboys pierdan en Washington más tarde para que eso suceda.
Minnesota (7-10) estaba eliminado de la contienda tras perder cuatro juegos consecutivos y seis de siete en una temporada truncada por la rotura del tendón de Aquiles sufrida por Kirk Cousins y la incapacidad del equipo para reemplazarlo.
Jared Goff completó 23 de 32 pases para un total de 320 yardas sin pérdidas de balón, lanzó su segundo touchdown en una jugada de 70 yardas con Amon-Ra St.Brown en el cuarto período. Además preparó a los Lions para el gol de campo de 39 yardas concretado por Michael Badgley que les dio la ventaja de 30-20 con 8:14 por jugar.