Odell Beckham Jr. fue dejado en libertad por los Browns después de una estancia cargada de drama que culminó cuando se le indicó que no se presentara a los entrenamientos.
La salida abrupta de Beckham —no del todo oficial— se dio el viernes, en su cumpleaños 29, y pocos días después de que su padre compartió un video en las redes sociales que destacó las jugadas en que el quarterback de los Browns, Baker Mayfield, no lanzó pases al tres veces jugador de Pro Bowl.
Fue el punto de inflexión en la relación con frecuencia inestable entre el equipo y él a quienes no les agradó el video ni que Beckham no haya contactado a Mayfield, quien se dijo dispuesto a resolver las cosas.
A Beckham se le dijo que no se reportara a los entrenamientos durante dos días al tiempo que su equipo de representantes negociaba con el gerente general de los Browns, Andrew Berry, los términos económicos para su salida.
“Después de considerarlo cuidadosamente, de discusiones y conversaciones internas con Odell y sus representantes, hemos determinado que lo mejor para ambas partes involucradas es que Odell ya no juegue para los Browns de Cleveland”, detalló Berry en un comunicado. “Agradecemos todos sus esfuerzos y contribuciones durante su periodo en Cleveland, pero hemos llegado a un punto en que lo mejor es seguir adelante como equipo sin Odell.
“Estamos concretando el proceso de otorgarle a Odell su liberación y le deseamos lo mejor mientras continúa con su carrera”.
Una vez que ambas partes acuerden los términos económicos —a Beckham se le deben ocho millones de dólares esta temporada— el wide receiver será incorporado en la lista de jugadores transferibles y puede ser reclamado por cualquier otro equipo con suficiente espacio bajo su tope salarial. En caso de no ser reclamado, será agente libre y puede firmar con cualquier equipo.
El entrenador en jefe de los Browns, Kevin Stefanski, tiene programada una reunión con los medios al final de la sesión de entrenamiento del viernes.