Josh Allen jugó como si fuera un quarterback experimentado, y participó de tres touchdowns en su primer partido de inicio como visitante en la NFL, para que Bills arrollara sorpresivamente a Vikings.
Fue Kirk Cousins quien lució como el novato. Regaló tres balones, incluido uno que soltó tras ser capturado en tercer down dentro de la yarda 20 de Minnesota.
Buffalo convirtió esos obsequios en 10 puntos y tomó el control del encuentro a la mitad del segundo cuarto, ante los abucheos del público.
Los Vikings (1-1-1) eran favoritos por 16 puntos y medio para este compromiso. Los Bills (1-2) eran apenas el sexto equipo desfavorecido por tal margen en los últimos 81 pronósticos de este tipo en la NFL.
Tras ser superados por 75 puntos contra nueve en sus primeros seis cuartos de la campaña, los Bills han tenido una ventaja de 41-9 en los seis siguientes.