Lamar Jackson tuvo que abandonar el encuentro en el que su equipo, los Baltimore Ravens, enfrentaban a Buffalo Bills, luego de sufrir una conmoción.
Jackson tuvo que abandonar el partido|AP
El mariscal intentaba mandar un pase a sus receptores; sin embargo, la defensiva de Buffalo logró golpearlo y terminó por estrellar su cabeza de lleno contra el césped.
Jackson tuvo que ser revisado por el personal médico como parte del protocolo para golpes en la cabeza y se anunció que no volvería al campo, pasando la batuta al novato Tyler Huntley para el último cuarto.
Previo a la jugada, el QB de Ravens había entregado una intercepción que le costó a su equipo una anotación de 101 yardas por parte de Taron Johnson.
Jackson tuvo que abandonar el partido|AP