El gusto por el emotivo regreso de Ricky Pearsall al campo de juego 50 días después de recibir un balazo duró menos de medio tiempo. Después, los 49ers de San Francisco tuvieron que lidiar con más malas noticias en la posición de receptor.
Brandon Aiyuk sufrió una lesión en la rodilla derecha en la derrota del domingo por 28-18 ante los Chiefs de Kansas City, que el coach Kyle Shanahan teme que se trate de una lesión en el ligamento anterior cruzado, que le pondría fin a su temporada.
Shanahan dijo que el equipo está esperando la confirmación de su baja con una resonancia magnética que se programó para el lunes, pero la expectativa es que Aiyuk se perderá el resto de la temporada, en la más reciente lesión en San Francisco, que no ha podido contar con el corredor “All-Pro” Christian McCaffrey, entre otras bajas importantes.
“Sé que muchos equipos tienen que lidiar con eso”, dijo Shanahan sobre la serie de lesiones. “No todos los equipos, pero nosotros estamos lidiando con eso en este momento. Hoy empeoró. Es difícil”.
Aiyuk sufrió la lesión al final de la primera mitad cuando recibió un golpe en la rodilla después de atrapa un pase en la zona roja. Se mantuvo tendido en el campo por algunos minutos antes de ser retirado directo al vestidor y rápidamente quedó descartado para el resto del juego.
Aiyuk, quien firmó una extensión por cuatro años y 120 millones de dólares a finales de agosto después de una extensa ausencia activa por disputa contractual, tiene 25 recepciones para 374 yardas en la temporada. Fue nombrado segundo equipo “All-Pro” la campaña pasada cuando sumó mil 342 yardas por recepción.
San Francisco ya no contaba con dos de sus otros receptores principales, Jauan Jennings, que se encontraba fuera de acción por una lesión en la cadera que no se espera que sea a largo plazo, y Deebo Samuel, que lidiaba con una enfermedad que lo limitó a cuatro jugadas contra Kansas City.
