El regreso de Tony Romo ha inyectado vida a unos Vaqueros de Dallas que parecían moribundos. El quarterback ayudó la semana pasada a su equipo a romper una serie de siete derrotas consecutivas, pero nada mejor para confirmar que están de regreso para vencer a unas Panteras de Carolina que están invictas y en total suman 14 victorias en campaña regular.
Romo envió dos anotaciones en la victoria de los Vaqueros 28-18 sobre los Delfines de Miami en su regreso a la titularidad, luego de sufrir una lesión en la clavícula en la Semana 2.
“Estamos muy contentos de tenerlo de vuelta. Aporta una gran energía. Es el líder de nuestro equipo”, comentó el ala cerrada Jason Witten.
El pasador ahora tiene la misión de mantener vivas las esperanzas del equipo de la ‘Estrella Solitaria’ frente al mejor conjunto de la Conferencia Nacional y que no se ha cansado se sorprender.
Aunque en el papel Carolina llega como favorito, los números muestran otra cosa. Dallas y el mismo Romo le tienen tomada la medida a los felinos.
Dallas ha ganado nueve de los últimos 10 partidos contra Carolina, de los cuales cinco son de forma consecutiva. La ocasión más reciente que las Panteras le pegaron a los Vaqueros a domicilio fue en 1997, desde entonces suman cuatro derrotas al hilo.
Romo ha enfrentado a sus rivales de este jueves en cuatro ocasiones. Siempre ha ganado; curiosamente es el único quarterback en la historia de la Liga con dos triunfos sobre conjuntos con foja de 9-0 o mejor, luego de vencer a Indianapolis (9-0) en 2006 y Nueva Orleans (13-0) en 2009.
El récord de Romo jugando en jueves es de 8-3 con 2 mil 746 yardas por pase, 25 envíos de anotación y nueve intercepciones; este encuentro también representa el reencuentro del ala defensiva Greg Hardy con su exequipo. El ahora jugador de los Vaqueros pasó sus primeras cinco campañas como profesional con Carolina.
“Es sólo un oponente sin nombre y sin rostro. Es un juego más”, declaró Hardy respecto al duelo; cabe mencionar que la defensiva de Carolina es la cuarta mejor de la Liga y suman 31 capturas de quarterback, el departamento comandado por el linebacker Luke Kuechly intentarán desmoronar los sueños de los texanos y mantenerse como el equipo dominante de la Conferencia Nacional.
