En sus dos últimas aperturas con los Azulejos de Toronto, Marco Estrada fue brillante.
El mexicano estuvo cerca de completar un juego sin hit ni carrera y un juego perfecto, éste último pensó que sería posible razón por la que le dolió más.
"En el primero dije: está bien'", relató sobre su apertura del 19 de junio ante los Orioles de Baltimore, cuando llegó al octavo rollo lanzando sin hit ni carrera. "No comencé a pitchear muy bien en las primeras dos entradas, así que está bien, si hubiera preferido que me dieran un hit más duro, pero esas cosas pasan, así que yo estaba contento", confesó en entrevista telefónica con RÉCORD.
En cambio el lanzador de Toronto reconoció que perder el juego perfecto ante Tampa Bay sí le pesó más, ya que pensó que haría historia. "Pero el próximo sí (me dolió más)", admitió Marco, quien el 24 de junio llevaba siete entradas y un tercio de juego perfecto hasta que Logan Forsythe le conectó una rola por tercera base que acabó con el encanto.
Una jugada antes, el tercera base, Josh Donaldson, había realizado una gran atrapada sobre los aficionados que hizo pensar al mexicano que lo lograría, pero en el siguiente bateador Donaldson ya no pudo.
"Parece que siempre que hay un sin hit o un juego perfecto, hay una jugada que alguien hace que es espectacular, y pensé que ese iba a ser la jugada, pero el próximo bateador dio una rola muy suave y otra vez Donaldson hizo lo que pudo, pero llegó a primera, eso dolió un poco porque estaba pensando que iba poder terminar ese juego".
Marco Estrada intentará seguir con su buen ritmo, pero no se enfoca en conseguir el juego perfecto, aunque no niega que le encantaría. "Nada más quiero hacer mi trabajo, quiero ganar y eso es todo. Si algo así pasa, que puedo terminar un juego perfecto, pues voy a estar muy feliz, pero no me quiero poner esa presión, porque sé que es algo difícil, mi meta es ganar el juego", finalizó.
