La espera terminó y los aficionados de Cleveland pudieron celebrar el título de un equipo profesional después de que los Cavs lograran una remontada histórica contra los Warriors de Golden State, por lo que más de un millón de seguidores abarrotaron las calles en el desfile del Campeón de la NBA.
LeBron James y compañía disfrutaron de la alegría de la afición, presumieron el trofeo conseguido el pasado domingo, se tomaron selfies y aprovecharon para saludar a sus fieles seguidores, quienes en cualquier lugar cercano al recorrido, como estacionamientos o entre columnas, se establecían para ver a sus estrellas.
Cleveland se convirtió en una tierra dominada por el 'Rey' LeBron, quien cumplió su promesa de darle la máxima alegría a un pueblo que se creía maldito en los deportes.
