La empresa nacional francesa de ferrocarril (SNCF) reportó un "ataque masivo" dirigido a paralizar su red de trenes de alta velocidad (TGV), afectando tres de las cuatro líneas principales que conectan París.
Según la SNCF, los ataques consistieron en incendios cerca de las vías y daños a elementos técnicos, indicando una coordinación y conocimientos técnicos por parte de los perpetradores.
Los problemas de circulación podrían persistir durante todo el fin de semana, coincidiendo con la inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024 y un periodo de alta demanda por las vacaciones.
Las líneas afectadas incluyen los ejes norte con destinos como Londres, Bruselas, Ámsterdam y Alemania; al oeste con Gran Bretaña y Burdeos, y al este con Estrasburgo y Frankfurt. Por su parte al sureste con Lyon y Marsella ha permanecido operativa hasta el momento.
El ministro de Transporte, Patrice Vergriete, condenó los actos como "acciones criminales" que afectarán a numerosos franceses en sus planes de vacaciones. Por su parte, el prefecto de París, Laurent Nunez, anunció el despliegue de refuerzos policiales en las principales estaciones para asegurar la seguridad de las instalaciones.