El Granada de Memo Ochoa no levanta en la Liga de España y de nueva cuenta cayó, ahora por 3-1 contra el Celta de Vigo, por lo que continúa en la última posición de la tabla general. El arquero mexicano jugó todo el partido y tuvo una actuación discreta.
El Celta generó peligro hasta que Verza le regaló el primer gol a Iago Aspas, pero eso no debe servir de consuelo para un Granada que ni cuando se vio 2-0 estiró sus líneas. Se lo jugó todo a su planteamiento defensivo y le salió mal porque cada error lo penalizó.
Wass rozó el segundo poco después de marcar Aspas pero Ochoa lo evitó en el mano a mano. Respiró el Granada pero apenas diez minutos, pues al filo del descanso Theo Bongonda, tras asociarse con Aspas, consiguió el gol de la tranquilidad para el Celta.
El Celta se sentía superior pero cerca estuvo de llevarse un susto después de que su rival, al que los cambios le dieron otro aire, armara un rápido contragolpe que culmino Kravets con un disparo que se marchó rozando el poste. El partido parecía sentenciado pero un resbalón de Cabral a falta de cuatro minutos para el final dio opciones al Granada, después de Kravets superase a Rubén Blanco. En el descuento Pape Cheikh acabó con el sueño nazarí.