El duelo de Ida entre Monarcas y León, disputado este miécoles en el Estadio Morelos, llamó la atención por la alta calidad futbolística mostrada en el encuentro, pero también por un detalle negativo en las tribunas.
Debido al grito homofóbico escuchado en el inmueble michoacano, el silbante José Alfredo Peñaloza tuvo que hacer efectivo el protocolo de la Liga MX y suspender un par de ocasiones el encuentro, perdiendo alrededor de 10 minutos del mismo.
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De esta forma, el trepidante empate en el Morelos pasó a la historia por ser el primer encuentro suspendido por este motivo en la Liguilla del balompié azteca.
Corría el minuto 85 del juego cuando se pidió en las pantallas del estadio terminar con los gritos discriminatorios a Cota, arquero de La Fiera, sin embargo, ante la insistencia, el árbitro decidió parar el juego y los futbolistas fueron a sus respectivos banquillos.
Debido a este incidente, se agregaron 12 minutos de compensación, tiempo en el que los locales empataron el cotejo al 101' con gol de Mendoza.
