Juárez se mostró indomable en casa y se llevó la victoria por 3-1 ante Santos. Carlos Acevedo intentó mantener lo más que pudo el cero en su portería, pero los dirigidos por Cristante encontraron la llave del gol.
Los Bravos quisieron imponer condiciones rápidamente y apenas a los dos minutos, Francisco Nevarez sacó un disparo desde las afueras del área que terminó por estrellarse en la base del poste izquierdo.
Con este aviso, los Guerreros se engancharon en el encuentro y se lanzaron al ataque. Este esfuerzo dió sus recompensa al minuto 20', ya que Félix Torres lanzó un pase filtrado a Marcelo Correa, el cual se quito al arquero local para sacar un disparo. La esférica parecía que se negaría en entrar, ya que se estampó en el poste, pero el rebote le quedó a Harold Preciado que solo tuvo que empujar la pelota al fondo de la red.
A pesar de que ya se encontraban abajo en el marcador, los locales no bajaron los brazos; sin embargo, no contaban con que Acevedo montó un muro en su arco. Primero al minuto 32', el cancerbero lagunero detuvo un disparo de Denzell García desde afuera del área. Instantes después Tomas Molina se alzó en el área para rematar de cabeza, pero el dorsal 1 evitó la anotación con su pierna derecha. Finalmente, este concierto de atajadas terminó al 38' cuando el arquero mexicano evitó que la esférica se colara por el ángulo izquierdo para después quedarse con la de gajos.
Para la segunda parte, Juárez encontró la fórmula para vencer a Acevedo y consiguió el empate al 49'. Jesus Dueñas cobró un tiro de esquina desde el costado derecho, la esférica llegó hasta el corazón del área donde apareció el 'Toro' Fernández para rematar de cabeza y poner la esférica pegada al poste izquierdo y conseguir el empate.
Más tarde en el encuentro, los locales le volvieron a repetir la dosis a Santos. De nueva cuenta Dueñas cobró un tiro de esquina desde el sector derecho, la esferica llegó al área grande para volver a encontrar a Fernández y que de nueva cuenta con un cabezazo la mandó al fondo de la red.
Rumbo al final del partido, Maximiliano Olivera buscó seguir explotando el poderío aéreo de su equipo al mandar un centro. La esférica llegó al manchón penal donde se encontraba Molina, el cual contactó la pelota para poner el 3-1.
