La llegada de Erik Lira a Cruz Azul no se fraguó de un día para otro. Fue un proceso extenso que nació en agosto del año pasado, cuando Juan Reynoso, entrenador que había terminado con la malaria celeste, se hizo cargo del Equipo de Estrellas de la Liga MX.
El partido dejó un sabor amargo para el combinado azteca: la MLS se llevó la victoria en penales. Pero el timonel peruano divisó a un joven prospecto que no podía dejar escapar. Todo comenzó gracias a Santiago Muñoz. El delantero todavía santista sufrió una lesión que le impidió llegar al compromiso.
Reynoso eligió a Lira como reemplazante. El novel contención surgido de Pumas apenas vio acción en el partido. Ingresó al minuto 79 y en la tanda de penales erró su disparo.
La derrota caló hondo, pero dejó huellas que marcarían el futuro de algunos protagonistas: Juan Reynoso entendió ese día que Erik Lira no podía ser elección de un día nada más.
El Clausura 2022 deparó el reencuentro entre maestro y alumno. Lira y Reynoso, junto a un renovado elenco cementero, buscarán bordar la décima estrella en el escudo de La Máquina. El futbol y el destino tenían una coartada.
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