En el marco de la última serenata para Cruz Azul, la búsqueda de boletos para asistir a la final no se hizo esperar. Si bien la intención de reunirse en los alrededores del hotel de concentración era para mostrar su apoyo a los futbolistas, algunos vieron la oportubidad de ofrecer entradas para la Final.
Entre los gritos de aliento a los cementeros se perdían las voces de algunos que intentaban revender boletos a un precio mayor del ofrecido en taquillas.
"Traigo dos de planta alta en 1400 cada uno", confirmó el revendedor que parecía ser parte de la porra de Cruz Azul.
Sin embargo, su esfuerzo parecía en vano, ya que salvo un par de aficionados que se acercaron a preguntar, el ofrecimiento de las entradas no estaba teniendo éxito.
Y es que hubo mucha molestia por parte de los seguidores que se formaron por horas en las taquillas del.Estadio Azteca sin fortuna debido a que se agotaron en apenas 9 segundos.
Para esta noche las autoridades de salud en conjunto con el gobierno de la Ciudad de México permitieron el acceso solamente al 25 por ciento de la capacidad del inmueble, razón por la cual el boletaje escasea y se espera que para la hora del partido el precio de las entradas incremente.