Cruz Azul no supo imponerse al estruendo mediático y cayó de manera sorpresiva ante Necaxa, en un partido que tenía controlado hasta los 84 minutos .
Los celestes tenían una dura prueba ante los Rayos, pues tenían que demostrar que la sacudida institucional a media semana no era suficiente para desestabilizar al equipo . Además, los celestes debían refrendar el triunfo en León.
Y así fue durante 83 minutos. Cruz Azul fue amplio dominador, fueron sólidos en defensa y en ataque siguieron manifestando un incremento de nivel, sobre todo, Uriel Antuna, quien nuevamente fue factor para La Máquina.
El extremo mexicano hizo lo que quiso por el lado izquierdo donde también generó el penal con el que Cruz Azul selló el partido.
Corría el minuto 30 cuando en una escapada Antuna fue derribado dentro del área y Erick Yair Miranda no dudó en decretar la pena máxima, misma que de forma inesperada fue ejecutada por el defensor Juan Escobar, quien festejó así su renovación de tres años en La Noria.
Para el complemento Juan Reynoso no dudó en entregarle a su afición lo que más quería que era ver a sus nuevos refuerzos, lo que generó una alegría inmensa en un estadio azteca que lucia con dudas en el arenque del partido.
Sin embargo, Necaxa puso en suspenso la fiesta cruzazulina con el solitario empate de Milton Giménez al 84', que puso en jaque a los cementeros .
Y de un momento a otro se fue apagando la noche cementera. Y es que al 94', Rodrigo Aguirre aniquiló a la Máquina con un golazo dentro del área.
Lo que era una fiesta terminó siendo una pesadilla y lo peor podría estar por venir para Cruz Azul que debe recuperarse anímicamente para encarar la Concachampions.