Atlético de San Luis cerró el torneo con una penosa goleada a manos de Pachuca, sentenciando su último puesto en la tabla de cociente, lo que le obliga a pagar la multa de 120 millones de pesos pero que en otras instancias hubiera significado un descenso.
El aforo en el Estadio Alfonso Lastras sufrió desde la tribuna como Tuzos clavó a su equipo cinco goles, descargando su molestia en contra de los jugadores rojiblancos al termino del partido.
Cientos de seguidores esperaron a que futbolistas abandonaran la cancha del estadio para mostrar su molestia con cánticos e incluso insultos; arrojando objetos pese a la presencia de personal de seguridad.
Algunos llegaron a causar daños en las tribunas del Alfonso Lastras, derribando puestas y vayas producto de la frustración de ver a su equipo en el fondo.