Después de cinco partidos consecutivos, el Atlas se reencontró con la victoria (2-4) y lo hizo al pasar por encima de un Toluca que sigue sin levantar y se mantiene inmerso en una mala racha. Pero fue un juego en el que, en tres ocasiones el árbitro Fernando Guerrero se asesoró en el VAR.
Después de los sinsabores que ha pasado Toluca en el torneo, parecía que el duelo ante Atlas hacía que la historia fue diferente. Y es que, a tan sólo tres minutos del inicio del juego, los Diablos Rojos parecían estar de vuelta, pues Leo Fernández cobró un tiro libre de manera tan perfecta, que Valber Huerta sólo 'puso' la cabeza para rematar y marcar el tanto escarlata. Parecía que el cuadro rojinegro había llegado dormido al encuentro, pero el Campeón había de despertar y lo hizo pronto.
Y ya cuando el reloj marcaba los ocho minutos de partido, la defensa toluqueña ni cuenta se dio de lo mal ubicada que estaba, dejaron solo frente al marco a Aldo Rocha, quien no perdonó y marcó el empate a uno. Aunque las cosas no se quedarían ahí porque para mala suerte de Ignacio Ambriz y su gente, Vanegas cometió una falta sobre Julián Quiñones, el árbitro Fernando Guerrero. recurrió al VAR y marcó penalti para los Zorros; el propio Quiñones cobró, falló y en el contrarremate terminó metiendo la pelota y con ello Atlas ya ganaba 1-2.
Ya para la segunda mitad, y minutos después de una mano de Vanegas, el central nuevamente va al VAR y ahí decide expulsar al jugador y decretar otra pena máxima a favor del Atlas, y Julio Furch marcó el tercer gol rojinegro.
Los Diablos Rojos trataron de reaccionar ya en la recta final del juego (88'), y fue gracias al joven Isaías Violante, quien de manera magistral acabó metiendo el segundo tanto mexiquense. Y un par de minutos después, Atlas se quedaba con un hombre menos por la expulsión de Jeremy Márquez, pero gracias al VAR sólo terminó amonestado.
Y para poner la cereza en el pastel rojinegro, en el tiempo de compensación Julián Quiñones de cabeza, marcó el cuarto gol a favor del Atlas y con el que los Diablos Rojos tuvieron que quedarse nuevamente en la lona.