Nicolás Castillo, jugador de América, reveló el momento más duro que vivió al sufrir una trombosis que lo dejó marcado y fuera de las canchas desde principios de año.
"Lo más fuerte fue cuando me vine a mi casa y estaba con mi hijo, ya había viajado, y me sangró acá en mi casa, fue un momento duro, muy fuerte, lo viví porque cuando me sacan de la cama, me llevan al auto y yo vi a mi hijo a lado y él veía toda la sangre, fue un momento muy duro.
"Yo iba pensando todo el camino en mi hijo, en la fuerza, en no quedarme dormido y al momento de llegar ahí no supe más nada, ese fue el momento más dura, crítico y llegué casi incosciente al hospital, eso me quedó marcado porque mi hijo vio todo eso", expresó en entrevista con TUDN.
Asimismo, el delantero chileno señaló que lo primero que pensó fue en luchar por tener una vida normal y después volver a las canchas.
"Hubieron momentos difíciles, días difíciles, no te voy a mentir, uno llora, uno se lamenta, uno se pregunta por qué le pasan esas cosas a uno. No pensaba en el futbol, pensaba en dar la pelea con lo que estaba en ese momento, quería salir del hospital, quería poner todas mis fuerzas en estar bien, en estar de pie, caminar, de tener una vida normal y lo del futbol venía después", dijo.