Con el título de Apertura 2023 como jugador de América, Julián Quiñones ya tiene cinco campeonatos en el futbol mexicano. El colombiano nacionalizado mexicano marcó el primer gol de las Águilas y fue protagonista en las dos expulsiones que sufrieron los Tigres.
Con ello se consolida como una pieza importante del club azulcrema, algo que habría sido imposible sin el apoyo de muchas mujeres que han estado a lo largo de su vida. Cuando joven, su padre les abandonó a él, su madre y sus tres hermanas, que lo han apoyado a lo largo de su carrera.
Para la madre de Julián era importante que su hijo estudiara, por ello el Club Deportivo Futbol Paz fue un capítulo importante del jugador y su familia, ya que pudo desarrollar su talento sin abandonar los estudis por completo de la mano de César Valencia, fundador de la institución.
Así, poco a poco se desarrolló el talento de Quiñones, que añotó 58 goles en el Torneo Nacional Sub 17 de Colombia, y llamó la atención de Miguel Ángel Garza y Alejandro Rodríguez, directivos de Tigres, para llevarse al atacante. En 2015, con el aval de su madre, el atacante llegó a la Liga MX.
Luego de firmar con la Sub 20, Quiñones siguió apoyando a su madre y a sus hermanas, pues nunca olvidó el apoyo que le dieron. Y por si fuera poco, han encontrado en su pareja, Ana Gabriela, otra mujer clave en su carrera, siempre al pendiente de sus logros.
Julián, ahora pentacampeón del futbol mexicano (dos con Tigres, dos con Atlas y uno con América), espera a su segunda hija, para seguir forjando una carrera exitosa rodeado de mujeres.