En los Clásicos Nacionales del futbol mexicano, la palabra favorito no existe. El momento que atraviesen uno u otro equipo queda de lado, el nivel futbolíostico se recupera y ambos conjuntos salen a matarse a la cancha porque enfrente está el rival odiado.
América y Guadalajara vivirán el domingo en el Estadio Akron una edición más del Clásico Nacional con marcadas diferencias en la clasificación del torneo Guard1anes 2021, que ubica a las Águilas como sublíderes con 22 unidades, mientras que Chivas es noveno con apenas 12. Diez puntos de diferencia entre uno y otro.
Sin embargo, la historia de los Clásicos ha quedado marcada por resultados inesperados, donde el 'favorito' cae ante el débil, como sucedió en la Liguilla pasada, donde Chicote Calderón fue la figura de unas Chivas que eliminaron al América, ganándole ambos duelos de los Cuartos de Final.
Y también está el ejemplo de la Semifinal de la campaña 1982-83, cuando aquel América de los récords del futbol mexicano, dirigidos por Carlos Reinoso, cayó sorpresivamente ante el acérrimo enemigo.
Pero un año después, vino la revancha más dulce para las Águilas, que en la Final de la temporada 1983-84, despacharon al Guadalajara, con el penalti atajado por el arquero argentino Héctor Miguel Zelada al Vaquero Cisneros en el decisivo juego de Vuelta, otorgándole a los azulcremas el título de la liga.
Santiago Solari debutará en Clásicos Nacionales del futbol mexicano en una cancha donde suele irle bien a las Águilas, pero enfrente tendrá al 'Rey Midas', Víctor Manuel Vucetich, uno de los estrategas más experimentados y 'colmilludos' del futbol mexicano.
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