Aparecen los actos discriminatorios. El Estadio Azteca fue sede de un nuevo episodio de gritos homofóbicos en el juego entre América y Chivas correspondiente a los Octavos de Final de la Champions Cup.
La tribuna que ocupa la porra americanista comenzó a gritar después del primer gol de Guadalajara: "el que no grite es un chiva maricón".
De momento la terna arbitral no ha aplicado el protocolo estipulado por la Liga: "En México, de acuerdo al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, la discriminación es una práctica que consiste en dar un trato desfavorable o de desprecio inmerecido a una persona o grupo de personas, basado en sus características físicas o por su forma de vida como el origen nacional, étnico, el sexo, la edad, la discapacidad, la condición social o económica, la lengua, la religión y las identidades sexuales".
Hay que recordar que recientemente se sancionó por ese mismo grito al equipo juvenil de la femenil de Cruz Azul luego de haber cantado lo mismo afuera de las instalaciones de La Noria.
Lo que está mal, está mal
Ese fue el comunicado donde los 22 jugadores posaron en la clásica foto antes de iniciar el encuentro en la grama del Azteca.
Sin embargo, poco duró el respeto en la tribuna del Coloso de Santa Úrsula.