América se colgó de milagro a la clasificación. Las Águilas estuvieron cerca de firmar un ridículo mayúsculo en casa al caer 1-2 (4-3 global) ante Atlético San Luis y avanzar a la Semifinal gracias a la ventaja conseguida en el partido de ida.
El futbol siempre da revancha y Unai Bilbao no dejó pasar su oportunidad de resanar el daño de su autogol en la ida, y al minuto 17 se metió al área para conectar un frentazo a poste cruzado y abrir el marcador que ilusionó a la causa potosina.
Sin embargo, ni siquiera el gol rival hizo reaccionar a las Águilas que se mantuvieron en su nivel mismo nivel discreto que permitió que Leo Bonatini incrementara la ventaja al 30' con otro remate de cabeza provocando una sensación de incertidumbre en toda la casa azulcrema.
Entonces llegaron los abucheos, los silbidos y la presión de toda la afición azulcrema a sus jugadores, a quienes se les notaba la intención de meterse al partido, pero el partido que planteó San Luis era hasta ese momento perfecto y nada les iba a arruinar su gran primer tiempo.
Llegó el descanso, pero sirvió de poco y nada porque el partido continuó en el mismo ritmo: con San Luis dominando y generando peligro, mientras que las Águilas decidieron no quitar el freno de mano dejando mucho que desear en actitud, intensidad y entrega.
Pero al Atlético San Luis se le terminó el gas y conforme avanzaba el reloj el peligro generado en el área americanista iba a menos hasta que por fortuna para los locales se encontraron con un rebote del arquero que terminó empujando a las redes Brian Rodríguez.
