Este martes, en RÉCORD+ En construcción, Roberto Ruano, quien funge como Secretario de la asociación de titulares de palcos y plateas, habló sobre lo que acontece con los palcos y las plateas del Estadio Azteca previo a que arranquen los trabajos de remodelación de cara a la Copa del Mundo del 2026.
Con los antecedentes que existen de los dos mundiales previos que organizó nuestro país y que tuvieron como cede la cancha de ‘El Coloso de Santa Úrsula’ (México 1970 y 1986) La asociación de palcos y plateas han dado a conocer su postura sobre una probable renovación en la propiedad de los dueños del inmueble de la Ciudad de México, algo que no tiene satisfechos a los propietarios.
Ruano comentó que, aunque la FIFA venga y haga alguna oferta sobre los palcos y plateas del Estadio Azteca, la respuesta de los dueños de 'El Coloso de Santa Úrsula' es simple: No estamos de acuerdo, esto debido a que ya hubo un pago por la propiedad de los palcos de la casa de las Águilas del América.
"Nosotros no estamos de acuerdo (en caso de que FIFA haga una oferta para rentar nuestros palcos o plateas) ya pagamos por el derecho adquirido, este derecho se respetó en el Mundial del 70 y en México 86", comentó Ruano.
Asimismo, Ruano habló sobre los derechos que les han ido quitando a los palcohabientes del Azteca, además de asegurar que no han sido avisados de las modificaciones y que no han sido recompensados por los partidos que no se han llevado a cabo, algo que viene por contrato.
"Nos han ido quitando derechos, el contrato original de los palcos habla de tres equipos de futbol (Atlante, Necaxa y América), y habla de que debemos ser compensados con el doble del valor cada boleto, en efectivo, por cada juego que no se lleve a cabo, nosotros estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias", aseguró Roberto Ruano.
SI NO NOS AVISAN HABRÁ AMPAROS PARA CANCELAR LA OBRA
Ruano confirmó que, en caso de que la organización busque realizar las remodelaciones sin autorización ni permiso de los dueños de las plateas y los palcos, los dueños buscarán ampararse para echar para atrás la obra e impedir que se lleven a cabo las remodelaciones.
"Nosotros ya tenemos preparadas medidas precautorias y en caso de una remodelación sin previo aviso, donde nos veamos afectados, amparos para suspender la obra, pero no queremos llegar a eso, queremos llegar a un arreglo feliz en donde, repito, todos ganemos", finalizó.