Diego Simeone es franco en sus conceptos, no tiene empacho en decir las cosas que piensa, eso sí, siempre bien fundamentadas. Es por ello que en charla con RÉCORD, el estratega del Atlético de Madrid desmenuza al balompié mexicano, al cual cataloga de pasivo, aunque de mucha calidad técnica, y al cual admira por la manera en que dan apoyo a sus juveniles en las fuerzas básicas.
¿Qué tanto sabes de la actualidad del futbol mexicano?
El futbol mexicano te invita a ver jugadores de buen juego. Posiblemente con un ritmo diferente al habitual, con un ritmo más pasivo. En el crecimiento que han tenido en la selección, por ejemplo, con futbolistas que han terminado jugando afuera le permitió al Tri ser mucho más competitivo. Apuestan al talento.
¿Cómo definirías tú a un futbolista mexicano?
Un deportista con talento. Cuando estuve en River nos tocó competir en la Sudamericana contra Chivas. Después estuvimos contra el América. Nos ha tocado ir a diferentes estadios, son fantásticos. Súmale a eso la pasión con la que viven los hinchas. Es un futbol diferente, con más técnica que la del futbol argentino, pero con menos ritmo.
Hablas de evolución. ¿En qué la notas y por qué crees que la tienen?
Tienen grandes posibilidades económicas en los clubes y eso les permite elegir. Cuando fuimos a trabajar contra Chivas y vimos la ciudad deportiva, es realmente preciosa. De hecho mi hijo hace poco fue con River y me contó que lo sorprendió. Los chicos trabajan mejor, porque de esa manera pueden crecer futbolísticamente en un lugar donde la pelota rueda y la pelota no salta. Donde el balón está bueno. No es determinante, pero es un paso más para llegar mejor a Primera División.
¿A la selección cómo la ves?
Creo que realmente está mucho mejor, porque están trabajando bien. Quieras o no la posibilidad de que el futbolista mexicano vengan a jugar a Europa lo hace crecer en el regreso a su selección. En ese sentido, no tengo dudas que seguirá sucediendo.
¿Qué diferencia hay entre la mentalidad de un mexicano o un latino y un jugador europeo?
Son formas diferentes. A unos los conoces, pero tiene que empezar a darlos cuando tienen 8, 9 años, los trabajos que hacían, cómo se estructuraba el entrenamiento en el que trabajaban. Cómo llegan con el tema del peso, con el tema de los ejercicios. Nosotros somos mejor individualmente que técnicamente. Técnicamente no somos buenos, somos normales. Como individuales somos buenos. ¿Por qué? Porque nos acostumbramos de chiquitos al potrero, a que el balón te salte. En cambio, aquí, en Europa, desde chiquitos empiezan con la técnica, con los controles y todo eso, del otro lado no sucede. ¿Qué es lo primero que le piden un jugador latinoamericano?: ‘Dale, gambetea’. Y cuando vemos un pibe que gambetea decimos: ‘qué bueno que es’. Y por ahí el pibe gambetea, pero no ve que la jugada no termina en nada. Pero como gambetea a tres, es bueno. Posiblemente aquí en Europa viene un pibe hace dos pases y juega mejor.
¿Y cómo hacer para que haya un poco de acá allá y de allá acá?
Es difícil que acá tengan la pasión, el carácter y la personalidad que tiene los futbolistas del otro continente. Se trata de cómo nos han criado, una cuestión cultural. A los europeos no le pueden dar la agresividad, la personalidad y la intensidad del latino, porque nosotros jugamos con el corazón. No significa que aquí no jueguen con el corazón. Sólo que lo usan de otra manera diferente que allá. Los latinos entrenando una manera y juegan de otra manera. Porque entrenan más ‘light’, más relajados, más tranquilo. Pero cuando van a jugar juegan, con todo. Acá entrenan como juegan, entrenan para eso y así lo cumplen.