A sus 32 años de edad, Pamela Gutiérrez se convirtió en el primer retiro oficial de la Liga MX Femenil, y aunque se despidió de las canchas como una portera reconocida que se forjó en Pumas y continuó en Toluca, sus comienzos en el futbol fueron como delantera, pero una lesión en la rodilla le dio un revés a su carrera deportiva.
"Yo empecé como delantera, nada que ver con mi posición de ahora, y empecé a sumergirme más en el futbol. Cuando me lesioné mi rodilla, como a los 18 años y pensando que la posición de la portería no exigía tanto, me empecé a poner ahí como hobbie, pero cuando veo que me gusta la posición le empiezo a tomar la seriedad, empiezo a entrenar y veo que la exigencia es lo doble, pero me gustó bastante y sentir toda la adrenalina hizo que me metiera de lleno", compartió la exjugadora en entrevista con RÉCORD.
Sin embargo, la exarquera, originaria de Aguascalientes, explicó que el cambio de posición dentro del terreno de juego no fue fácil, pues ella tenía en mente consolidarse como una goleadora.
"De primera instancia no sabía nada, yo nada más metía las manos y no me daba miedo. No me disgustó, pero a mí me gustaba meter goles, era buena y cuando tomé la portería empecé a aprender, porque no había mucho entrenamiento para las porteras, empecé a verlo en la televisión, me empezó a gustar, a apasionar y me quedé", comentó.
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Gracias a su dedicación y constancia, las cosas estuvieron a favor de Pamela, pues logró dar el salto al plano profesional, después de que Teresita Campos, auxiliar técnico de Pumas, la descubrió atajando y le vio futuro en la Liga MX Femenil.
"Empecé a jugar con los clubes, por ejemplo en la universidad; después pasé a jugar al representativo de Irapuato y de ahí fue cuando Tere Campos me visorió y una temporada después de que inició la Liga (Clausura 2018), ella me contactóy fue cuando entré en el plano profesional. Ella fue mi mentora", aseguró.
Pese a que su paso en el Máximo Circuito fue corto, la arquera se siente satisfecha por sus logros, pues aseguró que fueron causas externas las que la orillaron a tomar la decisión de decir adiós a las canchas.
"Considero esta etapa de mi vida muy buena, cumplí mi sueño, ese era mi primer objetivo, después cumplí mis objetivos específicos. Me quedo tranquila porque sé que di todo, lo máximo, que hay circunstancias que no estuvieron en mí, técnicas o temas extras, pero me quedo tranquila porque pisé estadios, viví lo que era una concentración, una Liguilla, conocí a personas muy importantes. Me llevo muchas anécdotas buenas y tragos amargos, como todo, pero puedo decir que me siento satisfecha con mi carrera", mencionó.
