¿Por qué?, ¿cómo pasó?, ¿qué ocurrió?, ¿hasta cuándo? Son algunas de las preguntas que una y otra vez, cada seis meses, se hacen millones de aficionados de Cruz Azul, que han visto a su equipo de fracaso en fracaso, no se logran explicar cómo de cinco finales de Liga han perdido todas, ya no saben cómo sobrellevar 18 largos años sin ver al club de sus amores proclamarse como el mejor de la Primera División y que han tenido que soportar todo tipo de burlas, además de ver de lejos la manera en que otros equipos los rebasan en número de títulos.
Encontrar un sólo responsable para una sequía tan larga es una tarea complicada, lo cierto es que en cada triunfo o derrota hay momentos clave. Aquí te presentamos 18 instantes en las Finales (mala suerte o errores), que han influido directamente en que La Máquina no logre levantar el título.
TEMOR DE JUAN REYNOSO NO LE PERMITE CORTAR CENTRO DE GARCÉS
El primero de ellos tiene lugar en el 19 de diciembre de 1999, cuando Cruz Azul enfrentó a Pachuca. La Final de Vuelta se fue a tiempo extra y apenas en los primeros instantes, los Tuzos atacaron por la banda derecha, Marco Garcés mandó un centro que atacó mal Juan Reynoso, dejando pasar el balón y dando oportunidad a que Alejandro Glaría marcara el gol de oro, que dejaba a los celestes en la lona.
GOL PERDONADO, GOL EN CONTRA, FRENTE A SANTOS
En el Clausura 2008, Sergio Marcarián regresó a Cruz Azul a una Final y lo hizo contra Santos, una escuadra sumamente poderosa que contaba con hombres como Oswaldo Sánchez, Christian Benítez, Daniel Ludueña y Matías Vuoso.
Corría el minuto 40 de la segunda mitad del juego de Ida, el marcador era 1-1, Gerardo Torrado mandó centro al área y luego de un rebote, el balón le quedó pleno a Nicolás Vigneri para que pusiera en ventaja a los suyos, no obstante, se desconcentró y abanicó de manera terrible, perdiendo el esférico y en el contragolpe, Chucho Benítez marcó el 1-2, aprovechando el desconcierto celeste, pues algunos pedían penalti.
ZEBALLOS PERDONA EN EL ÚLTIMO SUSPIRO EN LA COMARCA
Se jugaba el minuto 50 del segundo tiempo de la Final de Vuelta contra Santos, Cruz Azul necesitaba un gol para mandar al tiempo extra y estaba volcado al ataque, el balón se escapaba del terreno de juego, pero Villaluz lo alcanzó a rescatar y mandó un centro retrasado para Pablo Zeballos, que controló mal el balón y sacó un flojo disparo que fue rechazado en el área chica, el esférico le volvió a quedar en el rebote y con la parte interna volvió a intentar la anotación, pero la zaga se revolvió sobre la línea para despejar el balón y poner a llorar a la grada cementera.
LUGO SE AGACHA EN LA BARRERA
En la Final de Ida contra Toluca, parece que a Gerardo Lugo se le olvidó que cuando un jugador se pone en la barrera, es para bloquear el disparo de un ejecutor. Corría el minuto 21 cuando Amaury Ponce, especialista en tiros de castigo, tuvo una oportunidad de patear al arco, con su gran calidad puso el balón pegado al palo, pero lo que realmente dio espacio a que cayera el 0-2 de los Diablos, fue que el entonces mediocampista de La Máquina se agachó en el muro defensivo, ya que de haberse mantenido firme o saltado, el esférico se hubiera estrellado en él.
NO SE MARCA PENALTI SOBRE CARLOS BONET
En ese mismo partido, al 31', Carlos Bonet entraba al área y lo trastabilló Édgar Dueñas en una jugada que pudo marcarse como penalti; sin embargo, el silbante dejó correr las acciones.
CRUZALTA COMETE PENALTI CONTRA VILLALUZ Y LO SACA DEL JUEGO
En la Final de Vuelta entre Toluca y La Máquina hubo varios jugadores celestes que elevaron su nivel en busca del 'milagro', pues llegaban al Nemesio Díez con un marcador de 2-0 en contra. César Villaluz fue uno de los artífices de la reacción celeste al poner el centro que derivó en la primera anotación de su equipo.
Pero minutos después, en el segundo tiempo, el joven atacante entraba por la banda derecha en busca de recibir con el pecho un trazo largo de Gerardo Lugo, no obstante, José Manuel Cruzalta fue directo a golpearlo dentro del área, una jugada que era un claro penalti y hubiera significado el 2-2 global con aún tiempo por delante para buscar el tanto del título.
Sin embargo, el silbante, Roberto García Orozco, no concedió la pena máxima al no considerar la falta y para mala fortuna de Cruz Azul, tuvo que jugar con un hombre menos el resto de la segunda mitad y los tiempos extra, pues Villaluz no se recuperó y Galindo ya había agotado sus cambios.
LA MALA SUERTE DE YOSGART
Luego de ser el héroe celeste en la Final de Vuelta, la suerte abandonó a Yosgart Gutiérrez en la tanda de penaltis. En el momento más dramático del encuentro, en la muerte súbita, Miguel Almazán había cimbrado el travesaño con un violento disparo, el balón iba para afuera, pero el caprichoso destino hizo que fuera directo a la espalda del portero, que se había lanzado correctamente y de manera dramática, terminó en el fondo del arco, adelantando de esta manera una nueva desilusión cementera.
CRISTANTE SE ADELANTA EN COBRO DE VELA, PERO NO LO REPITEN
Luego del golpe de fortuna que tuvieron los Diablos, Alejandro Vela estaba obligado a marcar su penalti, decidió cobrar hacia la derecha y Hernán Cristante, experimentado guardameta de los escarlatas, se adelantó un par de pasos y alcanzó a detener el disparo, la ejecución debió haberse repetido, pero el cuerpo arbitral decidió que la jugada era válida y así, Cruz Azul volvió a 'vivir un infierno'.
TITO ADELANTA A MONTERREY EN EL A2009
La Final entre Cruz Azul y Monterrey en el Apertura 2009 está marcada por una 'nube de mala suerte' que se posó sobre la escuadra de Enrique Meza. Las cosas arrancaron mal para los de La Noria. Tito Villa, de gran temporada, llegó a la serie definitiva como Campeón de goleo, con 19 dianas, pero apenas al minuto 3, la fortuna le jugó una mala pasada: en un tiro de esquina, trató de despejar el peligro, pero terminó por mandar el esférico al fondo de su propio arco.
CORONA INFLUYE EN DERROTA EN EL TECNOLÓGICO
José de Jesús Corona ha mostrado durante su estancia con Cruz Azul un buen nivel, sus grandes atajadas dieron puntos a su equipo, pero dos errores suyos derivaron en la derrota de La Máquina en el Estadio Tecnológico.
Rayados y Cementeros brindaron un partidazo en el norte del país pese a las malas condiciones climáticas. La Máquina llegó a tener ventaja de hasta 1-3, pero la furibunda reacción de los regios, combinada con un par de desaciertos del cancerbero celeste, cambiaron la historia.
Al minuto 70, los de la capital no tenían reacción, Osvaldo Martínez aprovechó para subir por la derecha y mandó un centro que no llevaba mucho a primer palo, Corona hizo confianza, intentó salir por el balón, pero no se percató que Sergio Santana se le había adelantado, le agarró a medio camino y con el arco abierto sólo tuvo que contactar el balón para poner a festejar a los suyos.
El segundo yerro del guardameta se dio a sólo dos minutos del final. Corría el 88', el marcador era 3-3, Aldo de Nigris se fue a la banda para encontrar la de gajos y poner un pase filtrado a Martínez, quien en un principio había realizado un mal control y por un momento pareció que la zaga capitalina ganaría la bola dividida; sin embargo, una falla en la comunicación entre Corona y Cata Domínguez dieron pie a que el portero no saliera con decisión a quedarse con el balón y después de un taponazo, Chupete aprovechó y lo mandó al fondo del arco, dando una voltereta de escándalo.
TRAVESAÑO ROBA GOL DE ANTOLOGÍA A VILLALUZ
En la Vuelta de la Final del Apertura 2009, contra Monterrey, Cruz Azul llegaba con el marcador global de 3-4 en contra y con la urgencia de empatarlo lo antes posible. Apenas en el minutos dos, un riflazo de César Villaluz pudo haber cambiado el rumbo de la historia, pues en un saque de esquina, el joven atacante prendió el balón de botepronto, dejando completamente parado a Jonathan Orozco que sólo observaba cómo el balón iba, aparentemente, al fondo de su arco; sin embargo, nuevamente la fortuna dio la espalda a los de La Noria y el esférico terminó por estrellarse en el travesaño, para luego seguir en juego.
PINTO TAMBIÉN ESTRELLÓ EL BALÓN EN EL METAL
La Máquina era un vendaval en busca de la anotación, intentaba por derecha, izquierda, centro, jugada elaborada y disparos lejanos. Al 17', Fausto Pinto se animó a sumarse al ataque, tomó el balón en el centro del campo, condujo unos metros y luego sacó un violento disparo que estuvo a centímetros de entrar al arco, pero el voluble esférico se estrelló en el horizontal y se fue del terreno de juego, sumando el segundo poste celeste en sólo 15 minutos.
NO SE MARCÓ PENALTI SOBRE MARIO ORTIZ
La escuadra de Enrique Meza fue dueña del juego en toda la primera mitad y a cinco minutos de que ésta llegara a su fin, Mario Ortiz encontró posición de remate dentro del área de Rayados, pero cuando estaba apunto de sacar su disparo, fue jalado y derribado por Gerardo Galindo, pero el silbante Marco Antonio Rodríguez no se percató de la falta y no sancionó el penalti.
CORONA SALE PRECIPITADAMENTE... CHUPETE MANDA A DORMIR AL AZUL
Se agotaba la 'arena' del reloj, Cruz Azul nuevamente estaba a un sólo gol para mandar el juego a tiempo extra y se encontraba con todas las líneas adelantadas, como consecuencia, Osvaldo Martínez, que ya había sido definitivo en la Ida, tomó el balón por la banda y observó sin marca a Humberto Suazo y le filtro el balón, el trazo llegó a los linderos del área, Jesús Corona creyó que podía ganarle la carrera al entonces mejor jugador de la Liga, grave error, pues éste lo agarró a medio camino y con delicado picoteó marcó el gol que fulminó, una vez más, a los celestes.
POCA VISIÓN DE BARRERA DA VIDA AL AMÉRICA
Cruz Azul gozó de varios contraataques para finiquitar la Final del Clausura 2013 contra su más odiado rival, el América, y llevarse la copa a sus vitrinas, pero la falta de visión, puntería o la enorme figura de Moisés Muñoz, lo evitaron.
Pablo Barrera tomó el esférico al minuto 61, metió el acelerador a fondo haciendo gala de su buena conducción de balón, entró al área y sacó un potente disparo cruzado, muy difícil para cualquier portero, pero aquel 26 de mayo el portero azulcrema había sido 'bendecido' por lo dioses del Estadio Azteca, así que con un lance impresionante alcanzó a evitar el tanto del canterano Puma, cuyo error fue no levantar la cabeza y notar que en el centro del área se encontraba sin marca Javier Orozco, que sólo hubiese tenido que tocar el esférico para mandarlo al fondo del arco.
A TEÓFILO LE DA FRÍO Y DEJA QUE EL BALÓN VAYA AL POSTE
Si un contragolpe errado no era suficiente, al 73' se conjugarían dos factores para que Cruz Azul volviera a fallar. Por enésima vez en el cotejo, Barrera condujo rápidamente la ofensiva del cuadro de Guillermo Vázquez, dejó que el Chaco se abriera por la derecha para cederle el esférico, éste cambió el ritmo, se metió al área y ante la salida del guardameta americanista sacó un tiro a segundo palo, parte de la tribuna ya cantaba el gol, mientras otros lo lamentaban, pero de manera casi terrorífica para los seguidores de La Máquina, el balón se estrelló en el poste y siguió en juego, confirmando la pésima suerte de la escuadra en la instancia definitiva, y ante la mirada de un Teófilo Gutiérrez que no se atrevió a barrerse para asegurar la anotación.
ALEJANDRO CASTRO DESVÍA CABEZAZO DE MOISÉS Y EMPATA EL GLOBAL
Escenario más tétrico no habían vivido los de La Noria. Se jugaba el 92', todo América, incluido Moisés Muñoz, buscaba el remate de un tiro de esquina, era la última jugada, los azules sólo debían resistir unos segundos más. Llegó el cobro largo, pasado del manchón de penalti, los zagueros no alcanzaron a llegar al esférico y fue ahí cuando el guardameta de la Águilas terminó de ponerse el traje de héroe, se tendió de palomita para contactar con el balón y aunque su remate iba para fuera de la cancha, una infortunada intervención de Alejandro Castro lo mandó directo al arco de Chuy Corona, que ya no alcanzó a reaccionar e increíblemente, la Final se fue a tiempo extra y luego a penaltis.
HASTA EL CÉSPED JUGÓ EN CONTRA DE LA MÁQUINA
La tanda desde los once pasos sólo tenía amargura para el equipo de Memo Vázquez, principalmente para Castro. Sostuvo el balón, lo colocó sobre la pintura, tomó algunos pasos de distancia para cobrar con potencia, pero el pasto mojado lo traicionó y al momento de apoyarse para disparar, resbaló, ocasionando que su envío se marchara por encima del arco americanista y se encaminara la última y más atroz decepción para el pueblo cementero.
De esta manera, entre postes, jugadas infortunadas, autogoles y fallas arbitrales, Cruz Azul cumplirá 18 años sin levantar el trofeo de una Liga en la que cada vez más pierde protagonismo, no hay que olvidar que suma ya tres torneos consecutivos sin clasificar a la Liguilla, algo sin precedentes para La Máquina que, en el último año y medio, está haciendo historia de la mala.