Frente a un estadio con gran entrada, y el ánimo a tope, la Máquina de Cruz Azul dejó escapar el que pudo ser un importante triunfo a costa de los Camoteros del Puebla, que se rebelaron sobre el empastado y rescataron un empate en su visita a la capital del país.
El juego, de cierre vibrante, culminó 1-1 gracias a las correctas actuaciones de los guardametas. Tanto José de Jesús Corona como Cristian Campestrini respondieron de la mejor manera cuando fueron requeridos, sobre todo cuando el pitazo final se acercaba amenazantemente.
Fue al 37' cuando el conjunto celeste logró adelantarse gracias a una espectacular jugada individual del Chaco Giménez; el veterano futbolista fue asistido al interior del área, se sacudió la marca de dos defensores, y venció al guardameta argentino con un remate que llegó a las redes tras un ligero desvío rival.
El 1-1 cayó al 70'; Matías Alustiza apareció como el salvador de la Franja y mandó el esférico al fondo de las redes con un implacable remate que fue imposible de detener para el Campeón Olímpico en Londres 2012.
Cuando parecía que el empate estaba escrito llegó una pena máxima, como última oportunidad para los cementeros, que fue desperdiciada por Matías Vuoso. El naturalizado mexicano pateó flojo a la izquierda de Campestrini, quien se estiró y logró detener el esférico para poner punto y final a una igualada que parecía desvanecerse.
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