Los días de Guillermo Álvarez al frente de Cruz Azul podrían estar contados si La Máquina consigue alzar el título del Apertura 2018.
Al mantenerse como su gran asignatura pendiente durante las últimas décadas, el presidente celeste sabe que conseguir la novena estrella en el escudo de la institución podría representar su adiós al mando del cuadro cementero como directivo.
Y es que tan pronto como Ricardo Peláez tomó la dirección deportiva de La Máquina, Billy le hizo saber su gran deseo por conquistar el título de Liga y así poner fin a su mandato.
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Fue en 1988 cuando Billy fue elegido director general de la Cooperativa, tomando así el mando del equipo, mismo con el que, a pesar de haber logrado títulos como la Copa MX, así como de la Liga de Campeones de Concacaf, no ha podido celebrar otro campeonato de Liga desde el torneo de Invierno 97.
Prueba de ello son los siete subcampeonatos que el conjunto celeste acumula desde finales de los 90 hasta la fecha, entre ellos los del Clausura y Apertura 2008, Apertura 2009, así como la Final del Clausura 2013 ante el América, la cual quedó grabada de inmediato como uno de los episodios más tristes durante la gestión de Guillermo Álvarez.
Así, con un extenso historial de subcampeonatos e intentos fallidos, es como Billy aguarda una nueva oportunidad, que ahora tanto Pedro Caixinha como Ricardo Peláez encabezan, la cual, de ser correctamente capitalizada, podría convertirse en el final de una era celeste.
