Ahora, el otro tema: las nuevas inversiones. Mi padawan Luis Castillo encontró al personaje que quiere meterle lana al Atlante, no como dueño, pues aplica la misma: no está certificado para estar en Expansión MX, sino como socio del grupo que ya está a cargo de los Potros. Yo les explicó cómo es que le sobra billete para invertir en nuestro futbol.
El empresario es Emilio Escalante Méndez, quien pasó de ferretero a convertirse ahora en el único proveedor de todos los estados de nuestro país de vacunas antirrábicas para perros y gatos. Ahí nomás. Me dicen que son contratos de mil millones al año con gobierno.
En 2018, Mexicanos contra la Corrupción aseguró que por nueve años, la empresa Dequivamed, de Escalante, “tuvo asegurados contratos públicos que obtuvo sin competir, en los que decidió arbitrariamente los precios de las vacunas que distribuyó al gobierno”.
Si llega a invertir, será chamba de la Liga MX y su renovado afán por cuidar quién le mete lana a la industria pambolera, revisar si no incumple con sus altos estándares de calidad.
** ESTA NOTA FUE TOMADA DE LA COLUMNA DEL FRANCOTIRADOR