Real Madrid conquistó su undécimo título de Champions League, pero en el camino se puede criticar que no enfrentó a rivales de su talla, sobre todo en la fase de eliminación directa.
El equipo Merengue finalizó la Primera Fase como líder del Grupo A, con 16 unidades que resultaron de cinco triunfos y un empate, con 19 goles a favor y tan sólo tres goles en contra.
Con Zinedine Zidane reemplazando al cesado Rafa Benítez en la dirección técnica, el Madrid inició su recorrido de la Fase Final enfrentando a la Roma de Italia, equipo al que dejó en el camino tras derrotar por 2-0 en el Estadio Olímpico, alcanzando idéntico resultado en el encuentro de Vuelta.
Los Cuartos de Final pusieron al Wolfsburg como rival del conjunto madrileño, que cayó por 2-0 en Alemania durante el partido de Ida, aunque logró recuperarse con un contundente 3-0 en el Estadio Bernabéu.
Ya en Semifinales, el equipo de la Casa Blanca igualó 0-0 en su visita al Manchester City, pudiendo liquidar la serie y lograr su pase a la Gran Final al imponerse por 1-0 en el partido de Vuelta.
Para ponerle picante, la Final de la Champions reunió a los equipos madrileños como en la Temporada 2013-2014 y el clásico español volvió a definirse a favor del Real, que se impuso sobre el Atlético de Madrid por 5-3 en tanda de penaltis, luego de igualar 1-1 durante los 90 minutos reglamentarios y el tiempo suplementario.