Nápoles quedó eliminado de la Liga de Campeones al caer como visitante contra el Feyenoord de Rotterdam por 2-1, en una noche en la que los italianos necesitaban sumar tres puntos y que el Shakhtar Donetsk cayera frente el Manchester City para seguir vivos en la máxima competición continental.
Con un 4-3-3 como esquema táctico de inicio, los italianos sólo necesitaron minuto y medio para abrir el marcador, tras un saque de falta del guineano Amadou Diawara que remató de cabeza Raúl Albiol y despejó el guardameta Kenneth Vermeer en primera instancia, antes de que el polaco Piotr Zielinski aprovechara el rechace para enviar el esférico al fondo de la red.
Los de Giovanni van Bronckhorst encontraron portería en una jugada por banda de Steven Berghuis, que centró para que la estrella de los de Rotterdam, el internacional danés Nicolai Jorgensen, rematara de cabeza batiendo a Pepe Reina
Con empate en el marcador y sin cambios en el descanso, el Feyenoord perdió timidez en la segunda mitad y buscó con mayor desparpajo la portería de los italianos, que veían cada vez más difícil el pase a medida que, en el otro duelo del Grupo F, avanzaban los minutos sin que el Manchester recortara distancias con los ucranianos.
Ya en el tiempo de descuento, los italianos vieron como Jerry St. Juste, defensa que había entrado minutos antes para reemplazar al lesionado Bart Nieuwkoop, remataba de cabeza y a placer desde el borde del área pequeña para otorgar los tres puntos al Feyenoord.
Nápoles acabó así tercero del grupo F, con lo que disputará la siguiente fase de la Liga Europa, segunda competición continental mientras que los holandeses, que habían perdido todos sus encuentros de Liga de Campeones hasta ahora, lograron una dulce victoria en el último encuentro y ante su afición.