La nueva faceta de Ruud van Nistelrooy, delantero histórico del PSV y la selección holandesa, ha hecho que tenga los ojos encima de los mexicanos que militan en el equipo de Eindhoven.
Apenas en 2017, y ya siendo auxiliar del primer equipo, conoció a Hirving Lozano, con quien saldría campeón de la Eredivisie. Para este año, ya no pudo trabajar con Erick Gutiérrez porque su destino sería dirigir a los chicos del Sub-19.
“El año pasado estaba muy cerca de Chucky, pero los sigo igual y los veo muy bien. Como club, estamos muy felices con ellos, porque no son sólo buenos jugadores, también como personas son cracks. Son todo un ejemplo para la afición del PSV", expresó.
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Su rol con los Granjeros era entrenar de cerca con los atacantes, mejorar su forma de marcar, de disparar en la última zona de la cancha y brindarles algunos tips para encontrar huecos y ganar la espalda de los defensas.
“Un jugador con la inteligencia y calidad de Hirving puede jugar en la Premier o en la Liga española. Tiene gol y tiene asistencias. No sé dónde está su techo, nadie lo sabe. De momento está jugando muy bien, tiene mucho futuro por delante”, indicó.
El histórico neerlandés ahora es fan de los aficionados mexicanos, pues ya es más común verlos en el Philips Stadion con la pasión desbordada por sus ídolos y, quizá, eso le ha sembrado alguna que otra duda.
“Me hubiera gustado jugar en México, ¿por qué no? La verdad que nunca tuve una oferta”, dijo.
