Un doblete de Borja Mayoral permitió al Getafe sumar su primera victoria del curso a domicilio y coger aire en la clasificación tras vencer en Balaídos al Celta de Vigo (0-2), incapaz de sellar su permanencia matemática en LaLiga tras encadenar su segunda derrota consecutiva como local.
El Getafe supo jugar su partido. Juntó mucho sus líneas, presionó bien en la zona de creación, y eso impidió que Aspas, Brais Méndez y Denis Suárez entraran en juego. Cierto es que todo pudo cambiar si el remate de Brais, al minuto de juego, no se estrellara en el poste. Pero luego el dominio celeste fue estéril.
Le faltó mayor circulación al equipo de Coudet para desarmar al Getafe, que amenazó cada vez que pisó el área rival. El primero en hacerlo fue el delantero turco Enes Ünal, después de un resbalón de Dituro al intentar golpear el balón, pero su remate se marchó rozando el poste. El Celta dominaba pero sin profundidad, y Óscar volvió a rozar el gol con un remate que se fue alto.
Con Aspas desaparecido y Denis bien sujeto, al Celta careció de creatividad. Y el Getafe golpeó con un pase en profundidad de Óscar para Borja Mayoral, la novedad en el once, que superó a Dituro con un disparo cruzado.
El gol del futbolista madrileño destrozó al conjunto vigués, incapaz de imprimir ritmo al juego, desesperado por las continuas pérdidas de tiempo del rival. Y en el arranque del segundo tiempo, de nuevo tras un rápido contraataque que inicia Ünal en campo propio, el Getafe amplió su ventaja con otro gran gol de Mayoral, que aguantó con el cuerpo la presión de Aidoo y después armó un potente zurdazo para sumar su sexto gol desde su regreso a LaLiga en el mercado invernal.
Reaccionó Coudet. Metió a Nolito y Solari para jugar con su compatriota como “falso” lateral y tener mayor profundidad por las bandas. Pero el peligro lo continuaron generando Mayoral y Ünal, que pudo sentenciar en otro contraataque. Lo impidió Aidoo.
Con Nolito y Solari en el campo el Celta mejoró. Santi Mina probó a David Soria con un disparo muy centrado, y Galán entró en área rival por primera vez para sacar un buen centro que no encontró rematador. No era la noche celeste.
El portero Matías Dituro, con una espectacular mano, evitó el tercero de Mayoral, un minuto antes de que el VAR anulase el gol de su compañero Ünal, en fuera de juego tras tocar el balón Cuenca.
Faltaban 20 minutos y Coudet metió otro delantero, el brasileño Thiago Galhardo, para buscar una solución en el juego área. Así llegó la única amenaza en la recta final.