El centrocampista mexicano del Real Betis, Andrés Guardado, ha admitido que "en caliente" le "cuesta hacer una valoración correcta" de la nueva derrota sufrida por su equipo este miércoles, 0-2 a manos del Villarreal, en un encuentro en el que "los errores individuales han costado mucho".
Guardado declaró a Gol TV que los béticos juegan "bien", pero les falta "poner atención en los detalles individuales, en lo que le toca a cada uno", si bien reconoció que "las sensaciones" de este final de temporada "son las que son" y por eso "las quejas son entendibles".
"Lo único que queda es demostrar amor propio y profesionalismo. Debemos acabar con dignidad, no queda otra", rubricó el internacional azteca.
El defensor argelino Aïssa Mandi, por su parte, lamentó en la radio oficial del club que haya sido "otro partido que se pone cuesta arriba" debido al "0-1 en el minuto seis", que "obliga a hacer mucho esfuerzo".
Consideró que "luego, la expulsión" de su compañero Nabil Fekir al borde del descanso "ha sido determinante".
"Si once contra once era complicado, con diez... Debemos comenzar los partidos de otra manera y tenemos otro partido el sábado (ante el Celta en Vigo) para arreglar esto. El partido ante el Espanyol es una referencia. Hay que tratar de dejar el mayor número de porterías a cero y sumar tres puntos rápidamente", indicó Mandi.
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