Una fuerte multa o una sanción más severa, como el cierre parcial de su campo o la exclusión de la competición, son parte de los castigos que la Comisión de Disciplina de la UEFA piensa imponer al PSG en su reunión, en la que también tratará los graves incidentes ocurridos recientemente en Bilbao.
Una comisión plural, integrada por diez miembros entre los que hay juristas, secretarios federativos y exjugadores, estudiará los expedientes tras los sucesos del Parque de los Príncipes de París en el PSG-Real Madrid, y los de San Mamés en el Athletic-Olympique de Marsella, tres semanas después de la muerte de un ertzaina cerca del campo antes de jugar con el Spartak de Moscú.
En el primer caso la UEFA responsabiliza al PSG de encendido de bengalas, hecho que llevó al árbitro a detener el choque en dos ocasiones (m.48 y m.66) y utilización de un puntero láser desde la grada, además de insuficiente organización y bloqueo de escaleras.
Todo ello contraviene el artículo 16 del Reglamento Disciplinario de la UEFA, más el 33 y el 38 de su normativa de seguridad, por parte del PSG, que es reincidente y ya fue multado con 40 mil euros por bengalas en la fase de grupos de la Liga de Campeones contra el Bayern de Múnich.
Otro de los expedientes que el órgano de disciplina prevé resolver es el expediente por los sucesos en el Athletic-Olympique de Marsella de la Liga Europa, en el que dos agentes de la Ertzaintza resultaron heridos dentro de San Mamés, uno de ellos por un objeto punzante en el cuello.
La primera agresión de los seguidores franceses se produjo a la entrada del campo, al cuarto de hora de iniciarse el partido, después de que el vigilante llamara la atención a unos aficionados franceses y tras esto se produjo el ataque al otro.
Éstos accedieron escoltados y sin incidentes al estadio de San Mamés, en cuyas inmediaciones falleció tres semanas antes un agente de la policía autónoma durante los enfrentamiento entre seguidores radicales del Athletic y el Spartak de Moscú, en la jornada previa de la Liga Europa.