El Superclásico de Argentina entre Boca Juniors y River Plate terminó empatado a un gol y fue una curiosa jugada en el área xeneize la que se llevó los reflectores del partido.
Cuando corría minuto 44 de la segunda mitad con el marcador empatado a un gol, un balón golpeó la cabeza de Izquierdoz y parecía que se colaría en su propia puerta.
Andrada, arquero de Boca Juniors, fue rebasado por el balón y solo pudo ver como el balón se acercaba a las redes bote tras bote, pero de pronto, a centímetros de la línea de gol, el balón tocó el césped y botó hacía el lado contrario de una forma atípica y los xeneizes se salvaron de perder el partido.
La jugada le ha dado la vuelta al mundo y varios aficionados de Boca Juniors aseguran que Diego Armando Maradona ayudó a que ese balón no entrara en la portería xeneize.