Terminó la incertidumbre generada por la violencia y la Final de Vuelta de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors por fin se celebrará este día.
Aunque lejos de casa, en el Bernabéu mantiene las mismas expectativas que se tenían desde un inicio. La posibilidad de ver un partido espectacular con dos de los más grandes equipos en la cancha se mantiene intacta.
Ambos equipos tienen condiciones para ofrecer un juego de calidad, que empieza por la importancia de disputar una Final de Copa Libertadores, así como el orgullo en juego. En el primer partido quedó demostrada la intensidad de Boca y River.
Son dos de los planteles más caros de América, mientras los Xeneizes tiene el más costoso del continente con 132.5 millones de dólares, River Plate es la cuarta plantilla más cara con 85 millones de billetes verdes.
Sus futbolistas veterano tienen experiencia europea, jugaron y juegan al más alto nivel; mientras que sus jóvenes ya están en la mira de los grandes equipos de Europa.
Cada uno tiene figuras probadas como Carlos Tévez, Fernando Gago, Naithan Nández, Cristian Pavón, Mauro Zárate o Ramón Ábila por Boca Juniors, mientras que los de La Banda cuentan con estrellas como el arquero Franco Armani, Gonzalo Martínez, Juan Fernando Quintero, Lucas Pratto o Rodrigo Mora.
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En duelos de dicha competición, las estadísticas sugieren encuentros atractivos. De 24 partidos disputados entre los odiados rivales, sólo tres han terminado con empate sin goles. En cambio suman 51 goles entre ambos en esos enfrentamientos.
Terminó la espera y ahora sólo queda la posibilidad de disfrutar el juego en el estado más puro posible, alejado de las controversias, aunque jugar la Copa Libertadores en suelo de conquistadores suene extraño.
