En una jornada decisiva del Brasileirao, Ramón Díaz demostró con hechos su compromiso al salvar al Vasco da Gama de la amenaza del descenso. La frase pronunciada por el director técnico argentino al inicio de su gestión, "Vasco no va a bajar", se materializó con la victoria 2-1 sobre Bragantino en un emocionante desenlace.
El Vasco, encabezado por Pablo Vegetti, llegó a la última fecha fuera de la zona de descenso, pero con la necesidad de asegurar su permanencia frente a Santos y Bahía. La lucha fue intensa, considerando que América Mineiro, Coritiba y Goiás ya habían perdido la categoría. El objetivo se logró, y el equipo de Ramón Díaz mantuvo su estatus en la máxima categoría del fútbol brasileño.
En el enfrentamiento crucial contra Bragantino, el Vasco se impuso con sufrimiento pero determinación, asegurando su permanencia por un año más. A pesar de haber estado momentáneamente en la Serie B debido a resultados en otras canchas, el gol de Serginho garantizó la salvación.
La estadística de Díaz al frente del equipo incluye 24 partidos dirigidos, con diez victorias, seis empates y ocho derrotas, ubicándose en el puesto 15 de la tabla con 45 unidades.
El impacto de la jornada también significó un momento histórico para Santos, un gigante del fútbol brasileño con tres títulos de la Copa Libertadores. Por primera vez en sus 115 años de existencia, el equipo descendió, al perder 2-1 contra Fortaleza en casa. Los triunfos de Vasco y Bahía, este último con un contundente 4-1 al Mineiro, sellaron el destino de Santos.