El exfutbolista Dani Alves fue declarado culpable de violación en España, desatando reacciones en Brasil, donde Manuella Tyler Medrado, activista brasileña, ha solicitado la remoción de una estatua erigida en su honor en Juazeiro, Bahía.
Medrado, en una entrevista con EFE, expresó su preocupación sobre el mensaje que envía mantener el monumento, cuestionando los valores y la dignidad de las mujeres.
"Tenemos que formar una sociedad donde la cultura de la violación no esté normalizada", afirmó, añadiendo que este caso es una oportunidad para rechazar los crímenes sexuales, incluso rechazando la posición de "héroe nacional" de Alves.
Alves, quien salió bajo fianza días atrás tras ser condenado por agresión sexual en Barcelona, pagó más de 1 millón de dólares de fianza. La estatua erigida en su honor en Juazeiro ha sido objeto de repudio, siendo cubierta con bolsas de basura, cinta adhesiva y pintura blanca en distintas ocasiones, especialmente luego de la condena.
El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, mujeres se manifestaron alrededor de la estatua con pancartas denunciando la cultura de la violación y calificando a Alves como violador. Además, se ha revelado que el exfutbolista organizó una fiesta para celebrar su liberación de la prisión, evento que se extendió hasta altas horas de la madrugada.