Este fin de semana se llevó a cabo la Final de la FA Cup cuando, en Wembley, el Manchester City se enfrentó a Man United, en la primera edición del Derby de Manchester en el último partido de la competición más añeja a nivel de clubes.
Las acciones comenzaron rápido, apenas a los 13 segundos de tiempo corrido el City se puso adelante gracias a un golazo de Ilkay Gündogan, desde ese momento el equipo de Pep Guardiola monopolizó el balón provocando la desaparición del United sobre el mítico césped de Wembley.
Pasada la media hora de juego el arbitro y el VAR tomaron una decisión que podría parecer controversial tras marcar una pena máxima a favor de los dirigidos por Erik Ten Hag, misma que cobró de manera magistral el portugués Bruno Fernandes para igualar el marcador.
El dominio se repartió, el ManU tenía sus acciones de peligro y los Citizens también preocupaban al arco rojo de Manchester, en el minuto 51 Gündogan volvió a hacerle daño al odiado rival y marcó el segundo y definitivo gol del encuentro.
El Manchester City tendrá la oportunidad de igualar lo hecho por Sir Alex Ferguson y el Manchester United, quienes lograron el único triplete en la historia de la Premier League, el próximo 10 de junio, cuando enfrenten al Inter de Milan en la Final de la UEFA Champions League.