El belga Romelu Lukaku, delantero del Inter de Milán, rompió su silencio tras la derrota ante el Sevilla en la Final de la Europa League (3-2) con un mensaje en el que aseguró que el conjunto italiano "no está muerto" y que "esta experiencia" les hará "mejores como equipo".
Lukaku, que abrió el marcador de la final al transformar un penalti que había cometido sobre él mismo Diego Carlos, tuvo la mala fortuna de desviar una chilena del propio zaguero brasileño del Sevilla que significó el 3-2 definitivo.
"Lo que pasó en la final me enfadó, pero lucharé. Nunca tuve nada fácil en la vida como muchos de ustedes saben y esta experiencia me hará más fuerte", afirmó en un mensaje publicado este domingo en sus redes sociales.
Lukaku consideró que el Inter va "en la dirección correcta" y agradeció el apoyo recibido por él y su familia, así como el constante respaldo de los aficionados al equipo. "Volveremos. Siempre Forza Inter", concluyó el internacional belga.