El Liverpool se sobrepuso a la expulsión de Darwin Núñez por un cabezazo en su debut en casa al salvar el lunes un empate 1-1 ante el Crystal Palace en la Premier League gracias a un brillante gol individual de Luis Díaz.
En su primera titularidad oficial con el Liverpool, Núñez perdió el control tras un empujón con Joachim Andersen y le dio un cabezazo en la cara al defensa del Palace, lo que le valió la tarjeta roja directa al delantero uruguayo.
Incluso con 10 hombres, Liverpool se las arregló para dominar el juego en Anfield y Díaz le dio a su equipo un punto cortando desde la izquierda, deslizándose entre dos defensores y lanzando un tiro en la esquina más alejada frente al Kop.
Palace se basó casi exclusivamente en el contraataque y fue a partir de ese medio que Wilfried Zaha abrió el marcador en el minuto 32, rompiendo la trampa del fuera de juego para atrapar un pase en profundidad de Eberechi Eze y rematar en la esquina más alejada.
Liverpool ahora ha empatado sus dos primeros juegos: el equipo de Jürgen Klopp fue derrotado 2-2 por Fulham en el primer fin de semana, y ya está cuatro puntos detrás de Manchester City y Arsenal, los primeros líderes.
Su tercer partido será en Old Trafford el próximo lunes contra un Manchester United asediado que ha perdido sus dos partidos.
Y Núñez será suspendido por ello.
Obtuvo su primera titularidad después de un par de exhibiciones impresionantes y goleadoras desde el banquillo en el Community Shield contra el Manchester City y luego contra el Fulham, y también porque Roberto Firmino estuvo ausente por lesión.
Núñez, un fichaje de temporada baja procedente del Benfica, desaprovechó una presentable oportunidad temprana contra el Palace al fallar una volea en el poste trasero de un centro de Trent Alexander-Arnold, y luego golpeó el poste en el último minuto de la primera mitad.
Tal vez algo de frustración se había desatado cuando recibió la tarjeta roja. Mientras se empujaban al borde del área penal de Palace, Núñez pareció apuntar un cabezazo a Anderson. Luego, cuando el defensor lo enfrentó momentos después, se volvió hacia Anderson y lo golpeó en la cara.
Palace siguió jugando a la contra incluso con un hombre de más y Zaha estuvo a punto de arrebatarle la victoria cuando se estiró para recibir un centro y dar en el poste.